Elio Martínez.
Mayor inciso en la salud mental
Expectativas, estrés, demandas, compromisos, viajes, soledad en habitaciones de hotel, derrotas, entrenamientos, victorias, más derrotas, redes sociales, ruedas de prensa, periodistas, aficionados, dinero…
La presión a la que están sometidos los deportistas en competiciones de élite les deja con un desgaste mental enorme y, como el propio Adam Silver reconoció hace meses, en un estado de “infelicidad”. La NBA no es que haya pasado precisamente por alto la salud mental de sus miembros, pero redobla esfuerzos para conseguir que la liga tenga a jugadores y entrenadores. Estas son las nuevas normas que la NBA ha impuesto a las franquicias de cara a la temporada 2019-20:
Tener en nómina y disponibles para los jugadores de forma voluntaria de uno a dos profesionales de la salud mental que estén licenciados en este campo y tengan experiencia tratando clínicamente problemas de salud mental.
Tener localizado a un psiquiatra licenciado disponible para asistir en caso de problemas de salud mental de los jugadores.
Dejar por escrito un protocolo de acción en caso de emergencias de salud mental.
Poner en marcha procedimientos para comunicar a los jugadores y el cuerpo técnico la forma de actuar del equipo con respeto a la privacidad y la confidencialidad.
Acudir a un evento llamado “health and wellness meeting” celebrado en Chicago el 12 de septiembre en el que se profundizó en todos estos asuntos.
En noviembre de 2017 Kevin Love sufrió un ataque de pánico que le hizo abandonar un partido a mitad del tercer cuarto. Estaba experimentando sensaciones tan preocupantes como boca seca, corazón acelerado y problemas para respirar. Acabó tirado en el suelo del vestuario sin saber qué le estaba ocurriendo y de ahí se le llevaron a un hospital de Cleveland a hacerle multitud de pruebas. Lo que se pretende con estas nuevas normas es que los equipos estén preparados y sepan cómo reaccionar en casos de este tipo y que se cuide la salud mental de todos los jugadores.
(Santi Abad desearía haber tenido a su alcance todos los procesos que está introduciendo la NBA cuando él jugaba al baloncesto profesional en España. Su historia es desgarradora).
Por cierto, Kevin Durant ha pedido que todo el debate que hay alrededor de la salud mental de los jugadores y en cómo ayudarles se extienda también a los directivos de las franquicias.
No más cintas de kárate a lo Nadal
En febrero de 2019 las cintas tipo kárate estaban en auge en la NBA. Algo más de una decena de jugadores —Jrue Holiday, Jarret Allen, Montrezl Harrell y Jimmy Butler entre otros— utilizaban este tipo de cintas para la cabeza y se esperaba que en poco tiempo Nike tuviera preparadas versiones aprobadas por la NBA para que los jugadores las usasen y los aficionados las comprasen.
Pero la NBA las ha vedado de cara a la temporada 2019-20. Desde la liga han explicado que el año pasado no quisieron prohibirlas a mitad de campaña, pero ahora no serán una opción de vestimenta. Parece ser que los equipos no tenían claro el tamaño, el tipo de nudo y su seguridad (?) y ya no veremos a más jugadores con ese aspecto tan llamativo. A lo mejor lo que se busca es eso, llamar menos la atención y evitar que en unas temporadas la mayoría de los jugadores fueran por la cancha con cintas de este tipo como si fuese un torneo de karatekas.
El marcador más grande de la NBA
25 metros de ancho por 16 de alto y casi 25 millones de píxeles. El marcador del Chase Center, el nuevo pabellón de los Warriors, ya es oficialmente el más grande de toda la NBA y luce espectacular. Golden State hizo un pase especial a sus abonados para enseñarles las nuevas instalaciones del equipo y una aficionada subió a Twitter una foto en la que se veía el marcador desde las filas superiores del estadio. Es como ver la tele.
Por cierto, hablando del Chase Center, muchos se han quedado fríos por el aspecto exterior del estadio teniendo en cuenta que San Francisco es una de las ciudades más vanguardistas del mundo en todo, pero desde la franquicia han explicado que parte del motivo de que la fachada sea como es sirve para que el ruido dentro del pabellón sea aún mayor.
La estadística más-menos, mejor a largo plazo
Este verano Gregg Popovich denostó la estadística más-menos, diciendo de ella que “ni la miro. Nunca la he mirado. No sabes quien estaba en el partido en ciertos momentos, o si tenías una alineación devolución o si alguien jugó mal y ayudó a que alguien más tuviera un partido negativo. Es lo último que miro si es que lo hago”.
Y es verdad que en un partido concreto la estadística más-menos puede valer de muy poco por cosas como las que explicó el entrenador de los Spurs, pero también es cierto que a lo largo de una temporada completa queda una muestra muy válida para ver el impacto de los jugadores en la cancha y su influencia en los equipos.
En la temporada 2018-19, éstos fueron los líderes en +/-:
Stephen Curry, 689
Kevin Durant, 657
Giannis Antetokounmpo, 652
Danny Green, 638
Pascal Siakam, 593
Los tres primeros son tres jugadores de primera línea mundial y los dos siguientes, si bien no llegan a ese nivel, resultaron fundamentales en el juego de los campeones de la NBA.
En Box Plus/Minus, la estadística +/- ajustada de Basketball Reference (el estimado de los puntos aportados por un jugador cada 100 posesiones respecto a un jugador medio en un equipo medio), los cinco mejores fueron:
James Harden, 11,7
Giannis Antetokounmpo, 10,8
Nikola Jokic, 9,5
Anthony Davis, 8,5
LeBron James, 8,1
En Real Plus/Minus, la versión de ESPN (la estimación del impacto de un jugador sobre el rendimiento del equipo respecto a 100 posesiones ofensivas y defensivas que tiene en cuenta a compañeros, oponentes y otros factores), el curso 2018-19 quedó liderado por:
Paul George, 7,63
James Harden, 7,42
Stephen Curry, 6,84
Giannis Antetokounmpo, 6,69
Nikola Jokic, 6,48
En las tres listas vemos que los jugadores que aparecen lo hacen por méritos propios y, por tanto, el +/- sí es una estadística válida para ver tendencias. A buen seguro que Popovich sabe esto y lo que hace de menos es el +/- puntual, no el de todo un curso.
Repeticiones infinitas
¿Te acuerdas de esos vídeos en los que repiten la jugada espectacular de turno una y otra vez desde diferentes ángulos y también se repite el sonido ambiente de la jugada una y otra vez?
No sé si es por qué crecí en una época muy analógica pero me deja un poco frío ver tantas veces seguidas y desde tantos ángulos la misma jugada. Es como si le restase importancia. Pero bueno, traigo a colación este tipo de vídeos ya que a buen seguro muchos de ellos estén editados por inteligencia artificial. Un software ha pasado por las grabaciones de ese partido y ha localizado unas cuantas jugadas que cree que merecen ser compartidas.
Así es como la NBA y otras muchas ligas obtienen los millones de vídeos anuales sobre las mejores jugadas que se producen en esas competiciones. Con tanto smartphone y tanta ansia por consumir vídeo, los humanos no dan a basto a producir contenido y una empresa israelí llamada WSC Sports ha encontrado su nicho de mercado en ello. Su inteligencia artificial es tan buena y eficiente para encontrar jugadas que merecen la pena ser repetidas que sus clientes se cuentan por decenas y entre ellos están NBA, NFL, Bundesliga y muchos más.
Me llamó la atención la explicación de la empresa a cómo puede trabajar su software:
“Con la tecnología de WSC se puede identificar cada mate de un jugador francés y de inmediato distribuir esas jugadas a las redes sociales francesas”.
Siendo la NBA una liga en la que cerca del 25% de los jugadores nacieron fuera de Estados Unidos, es una forma muy rápida y fácil de generar contenido localizado para decenas de regiones y así potenciar el producto.
WSC está presente en 14 deportes y es la responsable de que a lo largo de 2019 alrededor de 1,6 millones de vídeos sobre la NBA publicados en diferentes redes sociales y medios sean generados por la empresa. Según ellos esa cantidad es unas diez veces más de lo que un equipo humano podría producir.
Como ya no se trata de batallar no solo en calidad sino también en cantidad debido a la competencia existente a todos los niveles en lo que a ocio se refiere, es mejor que cualquier vídeo tuyo aparezca donde sea y así haya más opciones de impactar a tu audiencia potencial.
La NBA y TikTok
Puede que muchos de los suscriptores de Extra nbamaniacs no usen TikTok —algunos a lo mejor ni saben lo que es—, pero el tema anterior enlaza perfectamente con la estrategia que sigue la NBA en cuanto a redes sociales. La liga se mete en cualquier red en haya tracción y adapta sus contenidos a la idiosincrasia de cada una de ellas.
La NBA genera varios contenidos diarios para los más de 5,5 millones de seguidores que tiene en TikTok y son diferentes a los que muestra en Twitter o Instagram, por ejemplo. En TikTok, hasta hace 13 meses conocida como Musical.ly, triunfan los vídeos de humor y por eso siempre hay espacio para mascotas, música, anécdotas o entrenamientos diferentes.
De hecho en TikTok es mayoría el público femenino y ese fue uno de los incentivos que vieron los dirigentes de la competición para meterse de lleno allí e influir en una audiencia nueva y diferente. Eso sí, la NBA tiene muy clara la estrategia general en cada red social: no promocionar una red en otra —no quieren llevar seguidores de Twitter a TikTok y viceversa—, lo único que buscan en cada uno de los sitios en los que están presentes es conseguir que haya más gente que vea sus partidos.
Puedes leer la primera entrega de ‘El verano NBA’ aquí, la segunda, aquí, la tercera, aquí y la cuarta, aquí.
Perdonad que no comente nada directamente del artículo. Tengo 51 años y me acuerdo de lo bueno que pudo llegar a ser Santi Abad y de lo mucho que me gustaba como jugador. He leído la entrevista que has enlazado, Elio, y me he quedado hecho polvo. Tremendo leer ese calvario. Ojalá salga del todo de ese hoyo que es la depresión.
Muy interesante Elio. Me parece un paso más de la NBA el trabajar por la Salud Mental de los jugadores. Se puede añadir a la lista, el caso de Alex Abrines que esperemos que esté recuperado y podamos disfrutar de su baloncesto.