Lágrimas. De emoción y alegría. Pero también de liberación. Había viajado 32 kilómetros hacia el sur desde Oklahoma City para compartir el momento junto a su familia y sus amigos en Norman, su ciudad natal. Una travesía de apenas media hora cuyo origen se remontaba mucho más atrás en el tiempo.
Había crecido muy cerca de las estrellas de la NBA. Fue test…